lunes, abril 03, 2006

Tu frialdad

La distancia no es olvido,
el olvido es no volver...
Alejandro Sanz
Y a pesar de todo, él va y me dice Ni tu destino ni el mío se han cumplido aún... ¿Y acaso es posible? ¿Puedo mantener un destino abierto como un balcón por el que saltar cuando me canse de este presente mío? ¿Puedo hacer un alto, y después proseguir, dejando en ese punto una seña, un jirón de vestido o un zapato de cristal, que permita al príncipe de mis días lejanos buscarme de nuevo? ¿Podría yo deshacer el camino andado? Y si lo hiciera... ¿continuaría él allí?
Autant de questions qui méritent des réponses...
Te esperaré siempre, le dice Julia Ormond a Pitt cuando éste se marcha en aquellas (algo empalagosas) 'Leyendas de Pasión', y al cambo del tiempo, cuando Brad regresa (después de haberse acostado con medio planeta) y la busca, descubre que ella se ha casado con otro (con su hermano, qué fort!). La joven compungida, nada más verlo, le murmura sollozando: 'Siempre' resultó ser demasiado tiempo.
Le tomo la palabra y pienso que lo más probable es que mi príncipe lejano ande ya con una madrastra a la que tarde o temprano tendré que mirar a la cara y decirle "Muy bien, tu ganas; es tuyo".
Y yo me iré... Princesa sin príncipe. Y cuando nadie mire, haré una nueva muesca en el cinturón: otro más para mi amarga y negra espalda del tiempo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿No te vale el príncipe azur de puig?